Después de muchos años he vuelto finalmente a leer a Kundera. Frente al exceso verbal, anecdótico más que todo, autores como Kundera prefieren la economía, la contención, el desarrollo del personaje y sus situaciones, lo cual se agradece. Los narradores de Kundera son también “pensadores obsesivos”, y derivan de detalles aparentemente nimios unas reflexiones realmente poderosas. El tema de “La ignorancia” es la decisión de no saber y el espacio gris que eso crea en las sociedades y en sus más insistentes “recordadores”: los emigrados. Situada en París y Praga, en el transcurso de apenas cuatro días, se desarrolla una historia de encuentros y desencuentros personales y, sobre todo, con la memoria y con el arte de no querer recordar. Me ha gustado mucho esta novela, muchísimo.
sábado, 30 de julio de 2011
La Ignorancia, de Milan Kundera
Después de muchos años he vuelto finalmente a leer a Kundera. Frente al exceso verbal, anecdótico más que todo, autores como Kundera prefieren la economía, la contención, el desarrollo del personaje y sus situaciones, lo cual se agradece. Los narradores de Kundera son también “pensadores obsesivos”, y derivan de detalles aparentemente nimios unas reflexiones realmente poderosas. El tema de “La ignorancia” es la decisión de no saber y el espacio gris que eso crea en las sociedades y en sus más insistentes “recordadores”: los emigrados. Situada en París y Praga, en el transcurso de apenas cuatro días, se desarrolla una historia de encuentros y desencuentros personales y, sobre todo, con la memoria y con el arte de no querer recordar. Me ha gustado mucho esta novela, muchísimo.
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1 comentario:
¡Qué bien Kundera! Con La insoportable levedad del ser y El libro de los amores ridículos encima, sólo tengo elogios para él y su prosa ensayistico-narrativa. Con esta recomendación aún más curiosidad me queda para abordar el resto de su obra. Saludos Uriel :)
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